Entrar en contacto con la naturaleza de Finlandia es descubrir la NATURALEZA (con mayúsculas). Bosques infinitos, cuyos árboles se extienden hasta donde alcanza la vista; lagos puros, de aguas tranquilas que surcar en canoa; cascadas arrolladoras y de salto fuerte que hacen sentir la vida que transita por sus aguas; valles y montañas, capaces de llevarnos a lo más alto y a lo más profundo en un instante; y, cómo no, sus siempre impresionantes auroras boreales.